jueves, 28 de septiembre de 2017

La Singladura Capitulo Uno

                             CAPITULO I

                            Humo a lo lejos.

 El Acorazado Eizer navegaba rumbo a la capital de Dianeriar, aprovechando los fuertes vientos. La corredera marcaba la friolera de diez nudos. Una buena velocidad para ir ciñiendose tanto.

Sin embargo a las tres de la tarde, despues de comer, Pierre, que en ese momento se encontraba vigilando en la cofa, avisto una densa columna de humo negro a babor.

Lo primero avisaron a su capitana y el 1º oficial, Estreiger puso rumbo 200º, rumbo que les llevaria directos al origen del humo.  Tocaron tambien zafarrancho de combate, por si las moscas.

-¿Que es lo que tenemos aqui?-Pregunto Pazert nada mas subir al puente.
-Humo a babor señora- contesto Estreiger- he puesto rumbo hacia el, tambien he mandado a Alfred a echar una visual.
 -Avisaste a Palowsky?
 -A eso estoy- y acto seguido levanto la tapa de un tubo en el que se puede leer "SALA DE MAQUINAS"- ¡Palowky!!
 -Si...- respondio una voz con un fuerte acento ruso.
-Ve preparondo los motores, igual tenemos que usarlos.
-Voy, dame veinte minutos.

El Eizer es un barco pequeño, pero no hay que engañarse posee tres motores en V alternativos de vapor, un v-8 y dos v-4 capaces de suministrar 35.000 Caballos juntos. Palowsky es el encargado de que tanto los motores como toda la mecanica del buque esten en perfecto estado.

Pazert jalo los tres telegrafos del puente a la posicion Slow Ahead. Los potentes motores vibraron bajo sus pies nada mas abrirles Palowsky el vapor.

-Quiero a tres personas aqui con los prismaticos, Pierre que siga donde esta  y vamos a reducir un poco de trapo- dirigiendose a Estreiger- Arriar los foques y la escandalosa.

El formido hombre asintio y salio a cubierta al tiempo que tres chavales Predat, Carts y Luna subian al puente nerviosos, preguntando por el alboroto.

-No pasa nada, una columna de humo alla lejos, creo que se ha hundido un barco- Fue orzando el timon muy lentamente- Hija, Luna cojed dos prismaticos y buscar cosas flotando, cajas, tablas, restos... lo que sea; Carts, hijo ve a ayudar a los de cubierta.

Se pusieron todos manos a la obra, el foco del humo se encontraba a apenas cuatro millas por proa
Pazert goberno el barco sabiamente para ajustarlo al viento, en cubierta orientaron las enormes velas para aprovecharlo al maximo. Estas dos complejas maniobras se ejecutaron con perfecta sincronia, sincronia que solo otorga la experiencia.

A la sinfonia se unieron los tres motores, Acero Prusiano y Ernesto estos son sus nombres de babor a estribor.

-Rizar la mayor y soltar un poco la gavia- grito Pazert a los de cubierta a traves de la megafonia.
-¡Señora!- grito nuevamente Pierre desde la cofa- estoy viendo algo en el agua...A 15º por estribor...
-Confirmo- dijo Predat- bultos en el agua 15º a estibor. ¡Son unos cuantos!
-¡Bien, prepararos para virar los de fuera!

Lentamente fue girando la maciza rueda del timon a estribor y a la par subio los telegrafos de de babor y central a Half Ahead dejando el de estribor tal como estaba. Palovsky recibio la orden y comenzo abriendo el paso del vapor de los acumuladores a los motores correspondientes, acto seguido dio mas caudal de combustible a las dos calderas maestras. Asi generaria el vapor necesario para el nuevo regimen.


En cubierta terminaron de rizar la mayor, reduciendo asi su superficie y prepararon las escotas para el movimiento de las velas.

-¡Viramos!- grito Pazert.

Metio todo el timon a estribor y a la vez puso el telegrafo de babor en Full Ahead y el de estribor en Full Astern. Palowky que ya se esperaba la maniobra reacciono rapido. En cubierta la pesada botavara de pino barrio la cubierta de banda a banda. El viento paso por la proa del velero, justo en ese momento Pazert empujo el telegrafo de estribor a Full Ahead, con ese nuevo empuje el Eizer supero ese momento tan dificil y volvio a recibir viento, pero... por la banda contraria.

La bitacora marcaba el rumbo 20º

Pazert navego hasta colocarse a sotavento de los bultos que habian avistado hacia unos minutos, se situo cerca de ellos y con el propio barco les hizo socaire.

En cubierta soltaron las velas y se prepararon para poner en facha al barco. Por su parte Pazert bajo todos los telegrafos a la posicion Standby Engine.

Telegrafo de un barco.

-Señor Fray lancele a Alfred un cohete amarillo, deberia ir volviendo ya...
-Voy señora.
-Walter por favor sube a cubierta- pidio Pazert, Walter es el electricista de a bordo.
-Voy- contesto una voz por el tubo de comunicaciones- me calzo y subo.

El prusiano se presento raudo en cubierta, como ya sabia lo que habia que hacer se coloco junto a la grua de estibor para ir subiendo las cosas mas utiles a bordo.

El resto de la tripulacion se afanaba en sujetar el maximo numero de cajas, armados con bicheros empujaban los bultos hacia popa donde Walter les esperaba con la grua lista. En el extremo del cable de esta, Kurst, el hijo de Hiro Honda el francotirador, enganchaba las cajas con la grua.

Realizo mas de una veintena de viajes arriba y abajo, pero a las seis de la tarde, hora de a bordo todos los bultos utiles estaban ya secando sobre cubierta. Fray Lupus, el padre de Luna contabilizo: Doce cajas desconocidas, tres atados de avena en buen estado y cinco barriles de Benzine llenos.

Una pequena fortuna que se les habia cruzado por delnate.

- ¿Y Alfred, cuanto lleva fuera?- pregunto Pazert visiblemente nerviosa.
-Casi tres horas Señora, ¿ Quiere que le lanze otro cohete?
-No, aun no. ¿ Cuanto combustible llevaba?
-Para tres horas- contesto Palowsky que se dedicaba a bajar algunos de los bartulos a la bodega- yo mismo le ayude a repostar.
 -¡Mierda! Ahora si que la hizo, ¿ Tanto le cuesta mantenerse cerca del barco?- Pazert se habia cabreado mucho.

En ese momento, sin embargo, escucharon aliviados el sonido del motor de un biplano en la lejania. Corrieron a cubierta y suspiraron al ver la inconfundible silueta del Faryley- III de Alfred en el  cielo por la aleta de babor.

El ligero y veloz avion empezo a dar vueltas en torno al Eizer y con un espejo mando el siguiente mensaje en morse:
"APONTONAR ?"
Y desde el puente le contestaron:
"10 MIN"
Pazert maniobro el Eizer para poner el viento lo mas a popa posible, no empleo las velas para simplificar la operacion. Palowsky se dirigio a la popa, justo detras de la torre de telemetria y entre las dos chimeneas naranjas se encuentra el ponton de lanzamiento- recogida para aviones, este estaba siendo operado por Fray quien lo puso de traves, paralelo al viento. Tanto Palowsky como Fray se arrodillaron junto al ponton y Carts blandio una bandera verde indicandole a Alfred que ya podia proceder.

El aparato abrio muchisimo mas un ultimo giro, enderezo y enfilo con el ponton del Eizer. Durante cuatro segundos que se convirtieron en horas para la tripulacion del barco recorrio la distancia que le separaba del.

Cuando quedaba un metro escaso tiro de la palanca hacia atras y el patin del biplano se engancho en el freno de la plataforma. Pero en vez de reducir el motor, acelero a tope por si no se habia enganchado bien. Solo cuando se freno del todo al final del ponton bajo gas y apago el motor.

-¿ Que pasa, estabas tomando cervezas por ahi, no?- pregunto Pazert con sarcasmo- ¿ No puedes quedarte cerca del acorazado, ni por un momento?
-Hay tanto humo que no se ve un carajo a diez yardas- se defendio el piloto a la vez que descendia, cansado, del aparato- Ademas he de mostrate algo en la carta...
-Bajemos pues.

 Fueron directos a una sala situada justo debajo del puente. Alli se encuentran los controles de artilleria, la mesa de cartas, controles electricos y la radio y el radar. Predat es la derrotera de a bordo.
-Bien...-comenzo diciendole Alfred- Si estamos aqui yo he avistado dos fragatas y un crrucero Confederados a treinta millas al surooeste-recorrio el papel con su dedo- tal que aqui... venian directos a nosotros, calculo que a doce nudos.
-Confederados...-suspiro Drick, el artillero- Dios nos coja confesados si nos ven...
-No va a pasar nada- intervino Pazert-¿ Hace cuanto fue eso, Alfred?
-Como una hora y media.
-Bien, tenemos una hora para ponernos a cubierto, hija, dado que ya no nos da tiempo a llegar a Rapturen, ¿ que tenemos a una hora de aqui?
-Pues, el arenoso de Holm a cuarenta y cinco minutos mas o menos. Es lo mas cerca que hay.
-Decidido pues, Estreiger ponga rumbo 290º a quince nudos. Y estean atentos, no tengo ganas de enfrentar una flota tan cerca del final de este viaje.

Se pusieron manos a la obra, volvieron a izar las velas, Palowsky apago los motores pues ya no eran necesarios  y volvieron a virar para ponerse al rumbo marcado por su capitana.

-Toma muchacho- dijo Fray al tiempo que le entregaba una de las cajas anteriormente recogidas del mar, la mas herumbosa dichos sea- A ver que te toca dentro- añadio con una risita.
-Veamos, veamos...- contesto este.

Pertrechado con una barra de acero, revento los cierres de la caja y, cual no seria su sorpresa cuando dentro encontro un rifle de precision calibre 45, una carabina de repeticion del 34, dos revolveres y una cinta de municion del 45 para ametralladora. Pero habia mas, mucho mas debajo, un uniforme de la marina confederada, ropas de buena calidad, jollas variada y tres lingotes de oro.
-Que cabronazo...- salto Fray nada mas ver la nueva riqueza de su compañero.
-Ahi te jodio, Fray- contesto Pazert en tono sereno- La caja se la diste tu...

Navegaron durante otra hora hasta alcanzar el arenoso, este no llega a asomar por encima de la superficie, es una zona en la que hay 23ft de profundidad con marea baja, el Eizer cala 19ft. Por lo tanto es adecuada para anclarse alli durante la noche.

En cuanto se hubieron cercionado de que ningun barco les habia visto pudieron dedicarse a otras tareas.

Como por ejemplo ir poniendo la mesa, Katerina la abuela de Pazert, mas conocida como Yaya, estaba haciendo ya la cena.
-¡Uhmmm!- entro Martta desde la sala de maquinas junto con su hija Day- parece que tenemos algo rico hoy...
-Hay lo de siempre...- comento la Yaya- comida.
-Bueno...- tercio Fray con desden- si cocina Katerina esta bueno si o si.

Cuando el antiquisimo relog de cuco situado en el salon, junto a la enfermeria dio las nueve y media toda la tripulacion, un total de diecinueve personas tomaron asiento en la inponente mesa de caoba situada en crujia.

Solo han de ser mencionados tres tripulantes mas: Richelieu, de direccion de tiro; Philip Duncan, el medico de abordo y el Monje. En el momento del incidente ellos estaban descansando en los camarotes, a popa.

Katerina empezo sirviendose una racion de su estofado, acto seguido la bandeja fue pasando por todos los comensales. La ultima porcion de carne era para Pazert, quien la comio directamente de la fuente.
-¡Joba!- dijo Carts despues de engullir un gran trozo de carne- ¡Esta riquisimo bis!
-¿ Lo dices en serio, o es solo que temes a mi escopeta- pregunto la anciana.
-Quienes temen tu escopeta no somos nosotros- tercio Palowsky- Son los Banquios, despues de lo que le hizimos a aquel carguero... dudo que vuelvan por aqui...
-Vamos, Vamos...- respondio Drick airado- solo disparamos al  aire una andanada... ¡No fue para tanto!
-Ya claro machote- dijo Fray- porque tu no estas en cubierta, esos bichos tuyos del 250mm retumban cada vez que disparan...
-Tu tambien retumbas de lo lindo en el baño, señorito- contesto el artillero.
Rieron todos la gracia, menos Fray que se quedo mirando a su compañero. 
-Oid...- comento Pazert en tono serio- ¿no os parece un poco curioso haber encontrado un buque confederado tan cerca de Dianeriar?
-Bueno- dijo Martta- el Mar Nuestro es como su patio de atras Pazert. Aqui hacen y desacen a su antojo.
-No se por que, pero, llevo dandole vueltas desde el mediodia, y me sigue pareciendo raro. ¿ No podra ser el preámbulo a una guerra?
-Puede ser- contesto Day con su voz expectral- llevamos ya un año con los Confederados muy tranquilos. Aunque con Ludendorff al mando quiza tengan suerte frente a ...
-¡Hombre!- salto Richelieu- ! Sus acorazados van muy bien equpados...
-...con un sistema novedoso de navegacion submarina!-contesto su compañero Pierre a la vez que chocaban los puños.
-Tal para cual...-suspiro Estreiger.
-Bueno, habera que ir dormir- dijo la abuela.

Recogieron rapido la mesa y, unos se fueron a hacer la primera guardia mientras que el resto se fue a dormir.

-Mañana entraremos a Rapturen- dijo Pazert a Estreiger- ¡ Buena Guardia!
-Buenas noches para usted señora- contesto el educadamente.


CONTINUARA...