La Sigladura Capitulo Diez.

                              Capitulo X

                     Los preciosos 75mm.

El Eizer llevaba atracado ya cuatro dias en el tranquilo muelle fluvial de Devetem. Durante ese tiempo Pazer habia luchado, en vano por mantener a Fray ocupado y evitar que pensase en ir a buscar a su hija en una peligrosa misión. Fue necesario reponer las dos anclas perdidas en los Manglares y comprar un pequeño esquife, aparte de la munición y las provisiones. Tambien repararon los leves daños ocasionados en dicho combate, no habian sido muchos por suerte y no se requirio de un astillero para esas reparaciones.

Debido a las noticias que tenian sobre el impresionante exito de unas nuevas armas en la Guerra de las Tres Naciones( asi la llamaban los periodicos de medio mundo), Pazert decidio tomar algunas medidas al respeto. Estas "nuevas" armas son los Embestidores y los torpedos autopropulsados. 

Los primeros, son submarinos con capacidad de navegar a doce metros de profundidad. Una vez sumergidos son invisibles desde la superficie. Su metodo de ataque es sencillo: embisten al navio por debajo de la linea de flotación, creando una enorme via de agua. Un buque de acero poco tiene que temer de uno de esos cacharros, pero los numerosos mercantes Romulianos o cualquier buque de la armada montealttina estarian en apuros, pues se construyen en madera. La triple Alianza ya habia empezado a construirlos y de momento tienen en servicio a unos quinientos de esos ingenios y ya tenian hundidos mas de una veintena de buques, con solo un mes de servicio.

El torpedo autonomo es una variante del Spar Torpedo. Es un dispositivo inventado por los confederado. Una carga explosiva con un motor y un sistema de dirección autonomo que tras ser apuntado y lanzado al agua contra un buque objetivo, detona por medio de una espoleta situada en una pertiga a cierta distancia del casco del navio objetivo, hundiendolo o dañandolo severamente. Es muy peligroso y bastantes barcos estan adoptandolo ya.

El Eizer cuenta con un medio bastante eficaz de protección contra estos artilugios, un bugle anti-torpedo. Es una extructura aislada interiormente del resto del volumen del casco que en caso de impacto la posible inundación se limita al area afectada, no todo el compartimento. Pero aun asi, esto ya no es suficiente, por lo que Pazert decidio instalar una nueva medida de protección: una red anti torpedo.

La red en cuestión evita que la pertiga del torpedo toque en el casco. Para ello la red se cuelga de unos botalones de dos metros y medio, hechos en madera, a los costados del buque. Con un botalon cada dos metros y medio y unos plomos que mantengan la red a seis metros de profundidad es suficiente. El principal inconveniente es que limita mucho la velocidad del buque, asi como su maniobrabilidad. Por ello si no hay peligro inmediato la red es estivada enrollada en la borda, debajo del cinton y los botalones plegados contra el forro y sugetados con cabos.

A la izquierda tenemos un corte trasversal del Eizer. En rojo aparecen los espacios del bugle, en amarillo el doble fondo y en verde la zona habitable. A la derecha un esquema de una red anti-torpedo en gris estan los botalones y en rojo la red propiamente dicha. Observese la imposivilidad de proteger la proa. Abajo tenemos un torpedo de pertiga o Spar Torpedo, la pertiga en cuestion puede medir mas de seis metros.

Aun con todo este trabajo no consiguio mantener a Fray ocupado demasiado tiempo. Podria haberlo puesto a preparar la cubierta para la instalación de un puente exterior, pero seria en vano. Aquella misma mañana se presento en su oficina y hablo largo y tendido con ella.

Habia apalabrado la compra de un pequeño jeep a un aldeano y tambien habia  conseguido un par de viejos mapas de la zona. Las opciones eran simples, ir con el o quedarse esperando alli en Devetem.

Pazert lo penso concienzudamente y decidio acompañarlo, haciendose cargo ella de las armas y las provisiones. Escribio una nota para su primer oficial. En ella, basicamente le decia que se hiciese cargo del barco durante un mes y medio. Pasado ese tiempo debia volver a buscarlos a Devetem. En caso de no haber vuelto en ese tiempo, el seria  el nuevo capitan. Todas las balas de Pazert se repartirian de la siguiente forma: tres cuartos a repartir entre la tripulación, segun rango y antiguedad y el cuarto restante para su tio en Willsenhaben.

Al dia siguiente soldaron una ametralladora del 45 al techo del cochambroso jeep. Palowsky y Martta pusieron el motor a punto lo mejor pudieron, mientras Day y Krust se despedian tristemente de ellos.

Pazert recogio su mochila, se echo el N-I7 y revisando que no se le olvidaba nada salio a cubierta. Fray ya le esperaba con el jeep cargado hasta los topes, ella preferia ir en su moto, un viejo modelo de caballeria prusiana. Cuando no la usan la moto va guardada en la bodega.

Le costaba despedirse de su querido barco, lo habia diseñado de la roda al timon. Lo habia visto en cosntrucción y llevaba ya mas de diez años surcando los mares con el. Si el barco pusiese hablar es seguro que , ella, por su parte enguago una lagrima furtiva por su mejilla y alzo la cabeza.

Lo primero son mis hijos- penso para darse animos.

Tomo un rato para hablar con Estreiger, el cual a pesar de su habitual ruda expresión estaba completamente roto por dentro, pero el mas que nadie sabe lo que es perder a un hijo, por ende no puso impedimentos a la partida de su capitana. Mientras hablaban un gran grupo de aviones paso sobre sus cabezas con gran estruendo. 

Al poco se perdieron entre los altos bloques de apartamentos. Por unos segundos Pazert se quedo callada, esos aviones eran bombarderos confederados, no recordaba el nombre pero estaba segura de que eran confederados.

Los insistentes ruegos de su primer oficial la obligaron a volver al mundo real,dio unas ultimas instrucciones y se despidio en un largo abrazo de Palowsky. Acto seguido se subio en su moto y pego una patada al arranque. El motor rotativo de cinco cilindros giro en falso un par de vueltas, negandose a arrancar. Alzo la pierna para volver a intentarlo, pero, unas siluetas que se acercaban por el muelle hicieron que se parase en seco.

En cuanto tuvo la certeza de que eran ellos bajo de la moto, tiro sus cosas al suelo y echo a correr. Al principio su tripulación no comprendia nada, pero les basto con mirar a donde estaba corriendo. Al poco tambien Fray inicio una rapida carrera hacia alli y escasos segundos despues toda la dotación del Eizer los imitaba.
-¡ Predat, Carts!- los abrazo nada mas llegar junto a ellos- Oh gracias, gracias, gracias...
-Estamos bien mama...- dijo Predat entre lagrimas- Gracias a este señor lo logramos. Llegamos a Devetem...
-Un poco tarde a decir verdad- contesto Pazert sonrriendo y alzando la cabeza saludo al estraño individuo que les acompañaba- Gracias por traerles¿ Como podre...- se quedo bastante impresionada con la apariencia de aquel individuo. Al cabo de un rato cayo en que no era un Bipedo, sino un Lacertillo- Ejem, disculpe¿ como puedo compensarselo?
-Oh, pierda cuidado no aceptare mas compensación que un simple gracias- dijo el educadamente- Me llamo Marley Emporien mucho gusto en conocerla.
-Pazert Hormeneich, igualmente. Y gracias por traermelos sanos y salvos- el Saurio izo una extraña mueca al escuchar su nombre, pero Pazert cayo en un detalle aun mas importante y es que Luna no estaba con ellos- Chicos¿ donde esta...
-¿ Y mi hija?- grito Fray, jadeando por la carrera- Carts, Predat¿ Donde esta Luna?
-Llegara en un par de dias, la traen en un carromato- contesto Predat. Dandose cuenta de la ambiguedad de sus palabras añadio- Esta herida, pero no te...
-Herida... herida...¿ Esta herida?- estaba a punto de explotar-¿ Que le ha pasado a mi hija joder?¡ Hablad!
-Un balazo- respondieron asustados- Un balazo en el costado. Pero esta bien Fray, no te preocupes.
-Ay, mi hija. Mi Luna agonizando en un carro de mala muerte- se cayo redondo al suelo de la emoción.
-No se preucupe señor. Uno de mis mejores medicos esta velando por ella-dijo Marley.
- ¿Y tu quien carajos eres tu?- pregunto el, irguiendose- Acaso puedo confiar en... bueno lo que quiera que seas. Como se que no me la estas jugando, eh, como puedo confiar en que tu medicucho atienda bien a mi hija- adopto una postura agresiva y todas sus frases sonaban a amenaza, sin embargo el Saurio ni se inmuto siquiera.

Apreto los puños con fuerza, casi parecia dispuesto a arrojarse al escamoso cuello de aquella criatura. En medio de aquel silencio la tensión se hizo palpable y en cuanto el contramaestre dio un paso al frente, con claras intenciones de agredir al Saurio, las cosas solo empeoraron. Pazert se dispuso para arrear una colleja a su subalterno, pero alguien se le adelanto.
 -Chee, quieto parao- dijo Katerina, la abuela de Pazert- Se ca non te fias del, pero, ejame decirte que he visto la mentira en los ojos de muchos hombres a lo largo de mi vida- escudriño los negros ojos de Marley y tras un ondo suspiro de aprovación añadio- Y pondria la mano en el fuego por este sujeto. Sin vacilar.
-Pero, mi hija...- musito Fray a modo de queja.
-Se lo mucho que te preocupa Luna, pero si no confias nel, confia en min.
-Esta bien Yaya- y girandose hacia el Saurio le espeto- Si mi hija no esta aqui dentro de dos dias te juro que te buscare y acabare contigo- hizo una brebe pausa- Sin dudarlo, ¿ me oyes?

Kterina y Palowsky se llevaron a Fray de vuelta al Eizer, en verdad nadie dudaba en cumpliria sus amenazas. Martta, por su parte, se llevo a Predat y a Carts al barco para que descansaran un poco.
-Debes perdonarle, no hay nadie a quien quiera mas que a su hija- dijo Pazert a tono de disculpa.
-Si lo se, puedo entenderle- dijo el bajando la vista- Se de primera mano lo que es perder a un hijo, a tu propia sangre.
-Bueno. Gracias de nuevo por traerme a mis hijos, te pagare por ello.
-Oh, no es necesario, en serio. No solo vine a traer a tus hijos. Tambien vine en una... como decirlo misión diplomatica.
-¿ Que clase de misión?- pregunto ella, interesada.
-Vengo a intentar anexionarme la ciudad libre de Devetem.
-A que pais pretende anexionarla, porque e de advertirle que no le va a resultar nada sencillo.
-A la Republica de Marley.
-¿ Llevas el nombre de tu pais?
-Al reves, mi pais lleva mi nombre y ademas soy el Presidente.
-Valla, interesante sin duda¿ Viene a conquistarla por las armas?
-No por las armas sino por las palabras. No creo en que haya de usarse la violencia injustificadamente.
-Bueno le deseo suerte, hay mas paises que pretenden lo mismo que usted¿ Como piensa hacerlo?
-Ya vera. En fin, debo despedirme señora. Hasta la proxima.
-Adios.

Pazert se quedo impresionada con aquel hombre. Sin embargo estaba feliz de no tener que abandonar su barco y confiaba en que trajera a luna en el tiempo indicado. Mientras tanto fue a estar con sus hijos un rato y a evitar que Fray perdiese los nervios. 

Como devian estar alli un tiempo mas opto por preparar la parte superior del puente acorazado para instalar un puente exterior mas comodo que los alerones. En la ciudad no habia manera de conseguir acero de calidad, asi que mejor ni intentar reformar el puente con malos materiales.

Dos dias despues del regreso de Carts y Predat una ambulancia aparco enfrente al Eizer. No era la habitual ambulancia militar, tirada por caballos, sino que era un vehiculo con un motor de vapor.

De el se bajaron tres personas, un medico, Marley y un enfermero. El medico y el enfermero bajaron a Luna en una camilla. Cuando Fray se acerco a ella rompio a llorar, no hay palabras que describan su reacción, de intensa alegria al ver retornada a su querida hija.

Philip examino su herida y dio el visto bueno para que subiera a bordo, a fin de cuentas el barco estaba en puerto y no se moveria demasiado, acelerando asi la curacion de la joven. Fray por su paret se disculpo con el Saurio por las amenazas de los dias anteriores.
-Le apetece venir a tomar algo, como agradecimiento- pregunto Pazert.
-Si, por que no.

Pazert consulto un pequeño mapa que se habia dibujado ella misma. La ciudad no era precisamente pequeña, abarcaba toda la delta de un rio llamado Linear, y ademas era la primera vez que visitaban esa ciudad. Localizo la cafeteria mas cercana y hacia alli se encaminaron.

Devetem es una ciudad curiosa y diferente, unica en todo Mar Nuestro, no solo por su arquitectura, llena de monumentos abandonados o convertidos en bloques de pisos, sino tambien por sus gentes y por la gran variedad de cosa que uno puede comprar alli. Cosas traidas por los bandidos del desierto o por comerciantes de otras aldeas mas al interior. Casi todas las casas son de ladrillo y adobe revocado de blanco estuco, ya ahumado por las incontables barcazas fluviales que pasan por el rio sin cesar. De hecho las casa mas pobres son practicamente palafitos construidos encima del agua por medio pe grueso pilones de madera. Debido a las barcazas, las chimeneas de las fabricas y a los escasos vehiculos a motor que circulan por la urbe el ambiente siempre esta cargado con un olor acre, el barro y la humedad no ayudan en este asunto, si bien es cierto que cerca del mar el aire mejora bastante. Es precisamente en esta zona donde viven los adinerados. Olores aparte, es muy facil perderse por sus callejuelas entrincadas y laberinticas, y algunas de ellas no son de recomendada visita. Mas alla de las defensas exteriores( trincheras, bunkeres, algun que otro fuerte...) Estan los campos de cultivo con varios villorios disperdigados por el paisaje. Mas alla de cinco millas del rio esta el implacable desierto.

Al llegar Pazert pidio un Extus mientras que Marley prefirio un te de setas caliente que, por cierto, es uno de los productos estrella de la ciudad junto con los componentes electricos variados y el Hidromiel. 
-Bueno, digame¿ Consiguio su objetivo, se anexiono la ciudad?
-Obiamente que si- contesto orgulloso.
-¿ Y como lo ha logrado?- pregunto impresionada- Hay otros paises que llevan intentandolo mucho mas tiempo que usted sin lograrlo.
-Yo no les he hecho promesas, les he dado cosas y garantias. Ademas necesito un puerto urgentemente.
-¿ Que les has prometido?
-Que limpiaria de oscuros toda Costa River y que traeria de vuelta las tierras de Erietra.
-Erietra, no fue ese pais arrasado por los Confederados hace muchos años- Pazert se extraño- Creo que venian aqui a buscar esclavos Lacertillos.
-Si, son mas conocidos como Congeredados por estas tierras. Hace muchas decadas llegaron y no solo arrasaron Erietra, sino tambien Brenam y Saraptiar. Pero un dia de la noche a la mañana se fueron. Sin saber por que se fueron y dejaron a toda su tropa aqui. Ahora esos ex-soldados sobreviven como bandidos.
-¿ Pocos Lacertillos quedan ya, no?
-Que va- dijo jocosamente- De donde yo vengo no hay ni un solo Bipedo. A proposito, he de enseñarle algo que fijo le gustara.
-Vamos pues- dijo ella.

La llevo a una de las islas superiores, a una pequeña zona portuaria. Una vez alli fueron directos a un gran almacen, algo abandonado y Marley abrio las puertas, mostrando una gran cantidad de cañones de 75mm en su interior.
-Solo puedo llevarme la mitad en barcarzas a la capital y no se que hacer con la otra, asi que si los quieres puedes llevartelos. Son Congeredados. Necesito, eso si que esto este vacio mañana a la mañana, vamos a convertirlo en una enfermeria del ejercito.

-Valla, por lo que veo se dejaron muchas cosas en su alocada retirada. No estaban preparados para una guerra a tanta distancia- dijo mientras examinaba las polvorientas piezas.
-Si, de hecho muchas de las armas que usamos en mi ejercito son de ellos. Pero ya casi no quedan almacenes como este, y ademas los puñeteros fusiles Asbert son una...
-Mierda...- completo Pazert- El mitico fusil con un cargador de linea que a la minima encadenaba los disparos. Es una autentica porqueria.
-No los usamos ni para entrenamiento, los fundimos para hacer piezas de artilleria grandes.
-En fin, me llevare unos cuantos. Por lo pronto enviare a mi artillero a que los examine.
-Esta bien.

En cuanto Drick examino al tacto algunos de aquellos cañones no pudo quedar mas satisfecho con su calidad. Los habia de tiro rapido y rotatorios, los Hotchkiss, parecidos a las gatlings. Pazert decidio instalar cuatro de cada, dos de tiro rapido en la popa, otros dos en los costados, junto a los obenques y en la zona central de la cubierta los cuatro Hotchkiss en unas torretas cupulares de baja silueta. Tambien se llevaria unos cuantos para vender y unos pocos de repuesto, quien sabe.

Cañon rotatorio Hotchkiss.

A pesar de su misión de entregar las sacas de correo en Montaltto aun tenian dos semanas de plazo por lo que no les corria prisa. Marle encargo a Pazert el transporte de un par de sacas de correo oficial, tanto de su republica como del senado deveteniano para llevar a Montaltto.

Pasados cinco dias, en los que Luna mejoro notoriamente dando  algunos paseos por cubierta y demas las obras estaban concluidas. Los cañones fueron limpiados e instalados en las posiciones indicadas, tambien compraron a precio de risa munición explosiva del 75mm y tras rellenar los depositos de combustible, alli podia comprarse Oleum a tres balas la tonelada, el Eizer quedo listo para partir. Tambien compraron barriles de vino local, que nada tenia que envidiar al dianerio en sabor y olor y varios fardos de te para vender.

El dia anterior a la partida asistieron a la marcha del ejercito "marleillano" bajo el Arco de la Victoria de la ciudad. recorriero la mayor de las avenidas desfilando bajo un baño de flores y vitores. Despues, a las puertas del senado, un consul de la ciudad hizo entrega a Marley de una llave simbolica. Por ultimo se izo la bandera de la Republica por encima de la de la ciudad.

Al dia siguiente un pequeño remolcador con una enorme rueda de palas a modo de propulsión los saco al mar. Una vez alli izaron algo de trapo para mantenerse al pairo e iniciaron las pruevas del nuevo armamento. 

Para ello lanzaron al agua una barrica de vino vacia y le dispararon, primero con los de tiro rapido y despues con los Hotchkiss. El resultado era hablaba por si mismo porque de la barrica no quedaron ni astillas en un par de minutos.

Despues de esa prueva cargaron las velas y pusieron un rumbo sur, que si el viento no rolaba, los llevaria ciñiendo suavemente hacia Montaltto en un par de dias.

Cuando la costa se perdia en la bruma, Pierre, de guardia en la cofa advirtio que se acercaban un par de barcos pequeños por la aleta de babor.

Un sonoro cañonazo trono el aire, de improviso.

Continuara...

    
    







 

La Sigladura Capitulo Nueve

                              Capitulo IX

                              The Tiger.

 

Los medicos llevaron a Luna a una carreta cargada de heridos. La subieron y dieron a un enfermero unas instruciones. Despues se despidieron diciendo que tenian que seguir trasladando heridos en el campo de batalla, pero que no se preocupasen, pues su amiga estaba en buenas manos.

Asi pues subieron otras dos camillas y el carromato se puso en marcha, tirado por dos caballos. Dos enfermeros trataban de preparar los pacientes, a Luna le pusieron una via con "suero" en el brazo y aplicaron agua fria en la herida. El agua fria es el mejor y mas barato antiiflamatorio disponible.

El vehiculo remonto, perezoso, una pendiente pedregosa. Al alcanzar la cima pudieron ver varias unidades de artilleria haciendo fuego sobre el valle. Carts dirigio una rapida mirada abajo realmente parecia que se estaba librando una batalla seria, habia contingentes de caballeria realizando cargas y grupos de infanteria esperando para avanzar. A diferencia de los bandidos, estos tenian pinta de estar minimamente organizados. La carreta comenzo a descender y el campo de batalla desaparecio de su vista.

En poco tiempo alcanzaron un campamento a las boscosas orillas de un rio. Numerosas tiendas de campaña se agolpaban en torno a algunos carromatos y a un polvoriento camino que iva a dar a un puente de madera sobre el rio. El campamento no estaba desierto, habia gente y soldados corriendo de aca para alla, armeros e ingeniros arreglando las armas, gente cargando furgones con municiones y barricadas moviles de madera, habia tambien varios morteros de 13-inch. que lanzaban sus pesados projectiles sobre la colina.

El carro de heridos freno enfrente de una gran tienda con dos cruzes verdes pintadas. En un abrir y cerrar de ojos descargaron a los heridos y el vehiculo dio media vuelta, volviendo al campo de batalla. Uno de los ordenanzas los acompaño al interior de la tienda, que resulto ser una especie de hospital improvisado.

Una vez dentro hablo con uno de los medicos, el sanitario se dedico a asentir, encogiendose de hombros mientras el otro le decia cosas incomprensibles para los chavales. Al cabo de un rato, el lagarto se volvio y les hablo.
-De vuestra amiga, mejor se ocupa mi colega...- dijo en un casi perfecto Detuchs, pero con acento extraño-¡ Boris, taeal huna, ladayk marid.
-'iinaa dhahib ...

El hombre, que era un autentico Bipedo se acerco a Luna y realizo un examen de la herida, hablo con una de las enfermeras, pidiendole utiles y medicinas. Despues con ayuda del ordenanza pusieron a la chica en una mesa de operaciones. Carts no dejaba de apretarle la mano mientras Predat miraba, nerviosa.
-Bueno, ha tenido suerte- comento en Detuchs, pero sin ningun acento mientras revisaba la herida- la bala entro y salio. No ha tocado ningun organo importante. Aunque ha perdido mucha sangre...
-Tome la que necesite...- interrumpio Carts, remangandose el brazo derecho de forma brusca- no se corte, vacieme si es necesario.
-Oh muchacho, eso no sera necesario tenemos sangre para transfusiones- le alboroto el cabello con la mano- Ademas no sabemos si vuestra sangre es compatible o no¿ Sois hermanos o algo?
-No- el medico señalo a Predat- Bueno yo y Predat somos casi hermanos.
Ah, bueno, voy a coserle la herida. Tomara un rato, pero si quereis ayudarnos podeis donar sangre alli- enebro un fino hilo de seda en una aguja- Nos hace bastante falta y ademas, aqui me basto solo.
 -Vale, esta bien- contesto Predat- Vamos Carts.

Carts solto lentamente la mano de su amiga y sigio a su hermana al lugar que les habian indicado. Tardaron solo quince minutos en ponerles una via, sacarles casi medio litro de sangre y ponerles un aposito en el lugar del pinchazo. Despues volvieron junto al medico, estaban algo mareados, pero eso no les importaba.

Luna estaba mejor, le habia vuelto el color, aunque estaba sedada. El doctor termino de vendar la herida, ya cosida y despues les dijo.
-Vamos a llevarla a observación, en una tienda de aqui al lado. Pero no os preocupeis, ya esta fuera de peligro.
-Madre mia, gracias- suspiro Predat.
-No me las des- contesto el- solo es mi trabajo.

Trasladaron a la joven a una autentica camilla y le pusieron otra botella con suero. El doctor recomendo a Predat y a Carts que comeiesen algo y tomasen el aire afuera, que su amiga estaria bien alli con ellos.

Asi pues, se sentaron afuera sobre una pila de cajas vacias. Fuera, en la parte de atras del improvisado hospital se apilaban decenas de cadaveres, tanto de Bipedos como de los lagartos. Un lagarto vestido totalmente de negro con una rama en la mano, caminaba junto a ellos, murmurando en tono de rezo y soltando sobre cada cuerpo una pequeña hoja. Despues dos jovenes enterraban a los caidos en grandes fosas no muy lejos.

Ni Carts ni Predat tenian animo suficiente como parase a mirar el curioso ritual, asi que optaron por mirar a un grupo de ingenieros que se afanaba en reparar un cañon ligero. Tras una serie de intentos lo lograron, cargaron un proyectil, cerraron el cierre de la recamara, apuntaron a donde no pudiesen hacer daño a nadie y dispararon. El arma escupio el projectil por la boca y ejecto el casquillo de papel vacio por atras, como debia ser.

Los ingenieros lo celebraron con risas y bricos, despues trajeron un par de caballos ya preparados y les engancharon el cañon para que lo llevasen a la cima de la montaña.

El pequeño biplano que habian visto al irse del valle aparecio entonces, venia desde el campo de batalla. Dio un par de vueltas y aterrizo, no muy lejos en una improvisada pista. De el pudieron ver bajar a un lagarto, no vestia como el tipico piloto, aunque, nadie alli vestia de manera convencional. Con paso apurado se perdio de vista entre las tiendas.

Al cabo de unos minutos un soldado se dirigio a ellos en un rudo Detuchs.
-Acompañarme, mi jefe os espera.
-¿ Tiger?-pregunto Carts.
-Si, seguidme, sin miedo.

Acedieron y el les precedio hasta una tienda algo mas grande que las demas, con pinta de cuartel. Una vez alli hablo con otro lagarto en su propio idioma.
-Señor, hace apenas una hora rescatamos a estos chavales del campo de batalla, hablan Englei y Detuchs.
-¿ En que zona?-Quiso saber el.
-En el "Bone Forest".

Se giro hacia los crios, que no habian entendido nada y con su cara mas amable se presento hablando en Detuchs.
-Hola, soy Marley, no temais aqui estais a salvo.
-Carts, mucho gusto.
-Predat, encantada.
-Corregidme si me equivoco, pero¿ No sois muy de por aqui,verdad?
-No- dijeron al unisono.
-¿ Como lo sabes?- pregunto Predat.
-Bueno, no teneis pinta de ser Congeredados. Mas bien pareceis... eh, como se decia- se rasco el menton, pensativo, por unos instantes. Finalmente chasqueo los dedos y exclamo- Xente do Mar¿ Era asi como se decia, no?
-Si, somos del mar¿ como lo supistes?
-Je, canta un poco. Poquisima gente tiene semejantes botas por aqui- dijo señalando a su calzado.
-¿Perteneceis a algun pais o algo?- Pregunto Carts.
-S, por supuesto. Somos el decimosexto cuerpo de ejercito de La Republica de Marley.
-¿ Llevas el nombre de tu pais?- pregunto Predat, alzando una ceja.
-Mas bien al contrario- contesto orgulloso- Soy el Presidente.
-¿Tu eres Tiger?
-Si, bueno, asi es como me conocen algunos. Es por mi avión. Es un Tiger P-15.

Predat se sorprendio, ese avión era un modelo Confederado, bastante antiguo por cierto. Junto con las armas que habian visto por ahi, tambien confederadas tenia bastantes motivos para sospechar. Prefirio no dar mas coba al tema y comentarselo luego a su hermano.
 -Bueno¿ Y que haceis vosotros por aqui, tan lejos del mar?- pregunto Marley, interesado.
-Hace unos diez dias nos separamos de nuestra familia a la fuerza y nos vimos obligados a cruzar estas tierras, camino de Devetem- respondio Carts.
-Ah, vale...- el rostro de Marley cambio completamente, se crispo de ira por unos instantes pero, consiguio dominarse-¿ Vuestros padres os esperan alli?
-Si, en efecto.
-Vale, pues os voy a acercar alli- dijo mas calmado- A fin de cuentas tenia que ir de todos modos, tengo negocios.
-Muchas, muchas gracias- dijeron los dos a la vez.
-No me las deis, a fin de cuentas es lo que haria cualquier persona civilizada. Da igual que seamos Bipedos o Saurios, hemos de ayudarnos, y si ademas os habeis separado de vuestros padres aun mas.
-¿ Que es un Saurio?- pregunto Predat.
-Yo mismo soy un Saurio- respondio abriendo los brazos- igual que vosotros sois Bipedos.
-Ah vale.
-Bueno, dejare esta zona a cargo del Sexto grupo de ejercito. Su general es un bipedo como vostros y tambien habla Detuchs, el fue el que me enseño- sonrrio lijeramente- si lo vieseis os partiriais de risa, aqui todos lo llaman"El Barbas". Bueno a lo que iba, vosostros dos ireis en un bombardero a la ciudad, y la amiga que teneis herida ira en un transporte de heridos por tierra. Llegareis antes...
-No, no queremos separarnos de ella- interrumpio Carts.
-Te entiendo, pero piensa en que llegareis dos dias antes. Asi podreis avisar a vuestra familia que estais sanos y salvos- viendo la cara de desconfianza de Predat añadio- Confiad en mi, no le pasara nada. Palabra.
-Vale, esta bien.
-Bien, partiremos mañana al amanecer asi que estad listos. De todos modos enviare a alguien. Por cierto, apuesto a que teneis hambre¿ Verdad?- viendo el asentimiento de los chicos siguio- Pasaros de mi parte por el rancho. No hay mucha variedad, pero es comestible.
-Gracias de nuevo señor- dijeron a la vez.
-De nada. Venga chao que tengo trabajo.
-Adios...- y salieron de la tienda.

La comida que les dieron era mas bien, una especie de pure o gachas, pero lo cierto es que sabia bastante rico y ademas servian en cantidad. Comieron junto a otros Saurios y Bipedos en una mesa de oficiales. Solo uno de ellos habalba el Detuchs y hizo de interprete de los demas mientras los dos le narraban su historia. Los militares mostraron caras de asombro al oirla, el que tres crios cruzasen aquel desierto, solos no dejaba de impresionarles.

Finalmente volvieron junto a su amiga, que dormia placidamente en la cama del hospital de campaña. Carts preparo los sacos de dormir en el suelo junto a ella. Mientras tanto Predat rebusco en los  bolsillos de la chaqueta azul de su amiga en busca de un papel donde escribir. 

Cuando por fin encontro uno, le dejo una nota por si se despertaba duarnte el viaje. Pidio una pluma a uno de los medicos y escribio:

Para Luna de Predat.

Mi hermano y yo vamos camino de Devetem en un avión. No te preocupes, aviasaremos a tu padre de que estas bien. Segunnos dijeron llegaras dos dias depues de nosotros. Confia en esta gente, no te haran daño por raros que parezcan, a nosostros nos ayudaron. Tambien conocemos a su lider, Marley.

Que tengas buen viaje, y que te recuperes.

Predat.

"Confia en esta gente, no te haran daño" Predat penso otra vez en el hecho de que esa gente usase sobre todo armas confederadas. No confiaba en esceso en ellos, pero tampoco tenia otra opción, ademas no queria preocupar innecesariamente a su amiga. Finalmente opto por dejarlo tal y como estaba.

Fray Lupus segun Luna.

Cuando iba a doblar el papel miro por la parte de detras un dibujo. Era Fray, dibujado por ella. Aunque no estaba del todo bien era bastante gracioso. Finalmente lo doblo y se lo dio al doctor Boris para que el se lo diese a Luna si se despertaba.

Durmiero placidamente toda la noche y al dia siguiente se mebarcaron en un viejisimo, pero reluciente, bombardero Wilker-G12 confederado tambien. Aquello resultaba curioso, pue esos aviones ya no se fabricaban. Dentro habia un gran numero de sacos de correo, algunos soldados y un fotografo. Lo habian convertido en un avión de carga.

Marley despego primero con su caza y despues despegaron ellos. Eran en total tres "bombarderos" y siete cazas. El no tarnsportar heridos en ellos era una decision sabia, porque las intensas vibraciones de los dos motores hubiesen sido escesivas.

Wilker-G12

En cuanto estubieron en el aire, viraron hacia el Este y pusieron rumbo a Devetem.

"Por fin"- penso para si Carts.

Continuara...

 

 

 


 

La Sigladura Capitulo Ocho

                           Capitulo VIII

                                 Restos.

El fuerte sol del mediodia caia a plomo sobre sus cabezas, para remediarlo llevaban atados unos trapos a modo de turbantes. Desde que abandonaron el ultimo oasis, hace ya tres dias, el Astro Rei no les abandono ni un segundo. Por las noches dormian en unos comodos y calentitos sacos de pieles. Calentitos porque durante las noches la temperatura cae a los cinco grados bajo cero.

Caminar durante el dia por estos parajes seria un autentico suicidio. Por ello, mientras dura el sol intenso del mediodia se entierran en la arena empleando los sacos de pieles y esperan a las seis de la tarde. Momento en el que remprenden el camino, hasta las dos de la madrugada, entonces colocan los sacos y duermen por turnos.

El paraje que atraviesan es monotono y yermo. De no disponer de la brujula de Predat estarian caminando en circulos, ella misma para poder calcular la Latitud, es decir, la distancia al ecuador, se ingenio un aparato llamado balllestilla

Ballestilla

. Al dia realiza dos observaciones con el, una a la mañana y otra a la noche. Asi mas o menos pueden saber cuanto han caminado en un dia, que suelen ser mas o menos quince minutos de meridiano, lo que se traduce en unas quince millas nauticas diarias.

Nada mal para estar en el desierto... 
-A ver si he entendido...- dijo Luna mientras ascendian por una duna- Tu nombre real es Willhem, pero como de pequeño le jodias las cartas de navegación a tu hermana terminaron llamandote Carts¿No?
-Si, en cuanto se despistaba¡ Zas! Le pintaba una casita y un par de arboles encima de los ejercicios- contesto el estirandose los tirantes hacia alante- Y siempre se comia ella la bronca, jejejeje.
-Ya...- tercio su hermana frunciendo el ceño- Siempre me escarallabas los problemas de navegación antes de que pudiera enseñarselos a mama. Si es que no se por que no te casque una colleja por entonces...
-¿ Quizas porque un servidor te robaba galletas y bizcochos? golosilla- contesto el sonrriente- Ademas, a base de hacer tantos ejercicios se te acabo dando tan bien eso de navegar por estima.
-Bueno, ahi te doy la razon.

Terminaron de remontar la duna y un nuevo paisaje se extendio a sus ojos, seguia siendo un desierto, pero ahora no habia arena solo piedras y...

Huesos descomunales.

Con las marmas en riste pasaron por enmedio de aquel tenebroso paraje, costillares, caderas, columnas veltebrales, craneos... Habia toda clase de huesos enormes y, a juzgar por su aspecto debian de llevar alli miles de años. De los huesos Bipedos solo diferencian, quiza en el tamaño, pues una calavera ya era tan grande como Luna, la mas alta de los tres. Casi todas tenian un agugero en algun punto.

Muchos tenian girones de tela enrredados. Continuaron avanzando con el alma en vilo, atentos a su entorno. Aquellos restos no eran normales, no pertenecian a ninguna civilización conocida, habia enormes estructuras de metal oxidas junto a los huesos, balas de rifle gigantescas desperdigadas por ahi y de vez en cuando pisaban algun que otro casquilloque se rompia con un sonoro crugido que les sobresaltaba.

Carts se acerco con sumo cuidado y recogio del suelo una vieja chapa de metal unida a una cadenita. Apesar del oxido pudo leer los siguientes relieves.
- "Capitan Ejercito Estadounidence, Everet Buterfly Fastford, alergico penicicilina, Grupo sanguineo... ¿cero mas? Septimo grupo de Marine...¿ ros? y Religuión Protestante"- dejo caer la pesada chapa al suelo-¿ Alguien entendio algo de esa mierda?
-Pues no- contesto su hermana.
-No...- susurro Luna.
-Pues yo menos, salgamos de aqui este sitio me pone los pelos de punta- se encamino al Norte, de nuevo- Quiera que no nos encontremos con alguna de estas "Criaturas"

La decisión fue unanime, asi que reemprendieron el camino por aquel yermo. Fijandose mejor, aquellas estructuras de metal parecian rifles, pero en un tamaño exagerado y de formas sumamente curiosas, tambien habia granadas, obuses gigantescos y otro material belico variado.

Durante una media hora caminaron por aque lugar, pero no fue hasta demasiado tarde que se dieron cuenta de un detalle importante...

No habian escuchado ningun pajaro en todo el rato.

Antes de que ninguno pudiera decir nada escucharon un sonido lejano por su izquierda, como una traca muy potente. Pronto se dieron cuenta de que era una descarga de fusileria. A esta le siguieron ruidos varios de artilleria y ametralladoras.
-¡ Corred!- grito Predat.

El suelo comenzo a temblar,  detras de ellos escucharon el ruido de cientos de pies, casi como un partido de futbol. Carts se giro un segundo mientras corria y lo que vio le helo la sangre.

Cientos de personas, vestidas con arapos y gritando a voz en cuello corrian en una gran turba en la misma diercción que ellos. Casi todas portaban armas de fuego y todas ellas eran bipedos. No lucian ninguna bandera o estandarte, asi que presumieron que se trataba de bandidos.

Predat amartillo el revolver y disparo un tiro contra la masa de gente, ignorando si le habia dado a alguien. Carts tambien disparo, aunque el si que apunto el arma. Luna dejo de correr e incando una rodilla en el suelo se dispuso a dispararles con su rifle.

Antes siquiera de que hubiese retirado el seguro, se detuvo, profirio un grito y, un momento despues se cayo al suelo. Carts y Predat se detuvieron y corrieron nuevamente a auxiliar a su amiga.

Estaba al borde del desmayo, presentaba un agujero de bala en el costado izquierdo del abdomen. Predat le dio la vuelta mientras Carts tomaba el rifle, gracias a dios habia un agujero de salida en la espalda. La herida sangraba abundantemente y por suerte no habia alcanzado la columna, de lo contrario hubiese sido fatal.

De momento solo podia introducir unos cachos de tela en las heridas, dado que en el torso en imposible hacer un torniquete. Los bandidos se hacercaban a pasos rapidos, y gritando como unos salvajes, ignorando completamente los disparos de su hermano. Con todo el cuidado que podia tomo a su compañera por el brazo y cargandosela volvieron a correr.
 -¡Hablame Luna, no te duermas!- grito Predat.
-No... No... No puedo- su voz sonaba mas bajo de lo habitual- tengo sueño, no puedo...
-¡ Vamos joder!- Luna dejo de renquear y se cayo al suelo- Mierda
¡ Carts, cogele por las piernas!¡ Rapido ostia!

Carts dejo de disparar y obedecio a su hermana y cargaron con Luna un gran trecho. Encontraron una oquedad entre los huesos y se escondieron dentro, desesperados. Con una piedras taparon de forma tosca la entrada, pero no aguantaria mucho.

Escucharon pasar a aquellos deslamados entre gritos y disparos, ahora que estaban cerca los oian maldecir en Englei. Tambien oyeron el caracteristico sonido de un motor pasar por encima de sus cabezas. 

Predat se ocupo de curar a su amiga de una mejor forma, trato de vendar y limpiar la herida, improviso unas vendas rasgando parte de su falda a cuadros.
-Predat, voy a salir...- dijo Carts.
-¡ Estas majara o que carajos!-grito su hermana-¿ Como vas a salir? Te mataran...
-Tarde o temprano nos encontraran, voy a ver si consigo algun...

Un hombre derribo las piedras y entro, sonrriendo de forma maliciosa. Carts lo golpeo con la empuñadura del revolver, y acto seguido, le volo los sesos de un tiro.
-¡ Voy a salir!- grito el, recogiendo del suelo el arma del muerto y despojandolo de los cargadores- No te preocupes... Toma el rifle. Y la munición, aun tienes doce peines.
-No hagas tonterias¿ Me oyes?- pidio su hermana, tomando el arma.

Carts asintio y salio del refugio, amartillo el arma, que resulto ser una FT- 12 Confederada. Algo curioso, teniendo en cuenta que los confederados estan a muchas millas al este, cruzando todo mar nuestro. De momento no se preocupo por eso y nada mas salir descargo una potente rafagada contra un grupo de bandidos.

Vacio otra mitad del cargador contra otro grupo y se lio a porrazos con un bandido, se hizo un corte en las manos intentando parar el cuchillo de aquel tipo y acabo matandolo a golpes con una piedra. El resto del cargador lo descargo contra un desgarciado que queria entrar a donde estaban su hermana y Luna.

Recargo el arma y se disponia a terpar por una pendiente de rocas cuando un extraño ruido lo detuvo. Sin darle tiempo apenas a pensar un grupo de caballos salto por encima del monticulo y cargo violentamente contra esos desalmados, lanza en riste. Sin tiempo a asombrarse un contingente de infanteria hizo aparición del mismo sitio, disparando tambien contra los bandidos.

Carga de caballeria.

No tenian pinta de ser un ejercito, o almenos no un ejercito conocido y bien equipado. Cda uno de sus soldados vestia de forma diferente, parecida en el fondo, pero totalmente dispar entre si. Del mismo modo que no tenian un uniforme, tampoco tenian la misma arma todos. Ni banderas, ni enseñas, ni siquiera un minimo de organización... Carts se pregunto para si, si no estaria ante otro grupo de bandidos.

Los estaba mirando, totalmente paralizado cuando uno de ellos bajo de su caballo y se dirigio hacia Carts. Este reacciono algo tarde y para cuando quiso sacar su revolver ya lo tenia encima. Era un lagarto, como los de aquella aldea, y nada mas estar cerca de el pronuncio algunas palabras en su lengua, imposibles de comprender para el.
-مهلا، لا تخافوا، أنت لا تؤذي
-No le entiendo...- dijo Carts.
-Hey, do not fear, you are not hurt- repitio el, en un burdo Englei con extraño acento.

Carts se quedo de piedra nada mas esas palabras salieron de su boca. El lagarto viendo su cara de incomprensión siguio probando en mas idiomas.
-Heu, vereor, ne te non nocuerunt. Quiescis- dijo de nuevo,esta vez en Romul. Como Carts no se inmuto siquiera- Hey, ne crains pas, tu n'es pas blessé. Calme Peux-tu me comprendre?- añadio en prinitivo Bretong.
-Yes...- contesto Carts por fin en Englei.
-I'm not going to hurt you, come with me and I'll get you out of here.- continuo el, guardandose el arma y tendiendole una mano amistosa.
-I can not, a friend is hurt ...-contesto, señalando hacia la cueva- It is there.
-Okay- con un pequeño silvato llamo a dos de sus compañeros y tras un intercanbiar unas palabras le dijo a Carts:
-They are doctors and they will help your friend, tell us where is this.
-Come with me- dijo el.

Los tres lagartos le siguieron hacia la cueva, cargados con una camilla. Nada mas entrar se arrodillaron junto a Luna y procedieron a intentar estabilizarla. Todo delante de una boquiabierta, y manchada de sangre Predat.
-¿ Quienes son estos?- pregunto ella.
-Nos van a ayudar, no te preocupes.
-¿ Acaso los conocias de antes para confiar asi en ellos?- pregunto con cierto tono de enfado.
-No has visto lo que yo- contesto el.

Predat iba a decir algo pero uno de los doctores la interumpio.
-It's very bad, better come with us to the base- dijo mientras movian a Luna a la camilla- There is no time to lose.
-All right- respondio Carts.

Salieron de la pequeña cueva. Ahora apenas se escuchaban tiros, o gritos por lo que la batalla debia de haberse alejado. El que habia hablado primero a Carts se subio a su caballo y tendio una mano a los dos hermanos
-¡ Go up! they'll take care of your friend. I will take you with our leader. 
-No, we will go with her- respondieron los dos al unisono, apretando las manos a su amiga. El otro se limito a encogerse de hombros.  
-What is your leader?- pregunto Predat, con una pronunciación casi perfecta. 
-That is- respondio señalando a un pequeño biplano que daba vueltas sobre el cielo- The Tiger...- añadio quitandose el sombrero.
-You have to leave- dijo uno de los enfermeros.

Los dos asintieron y echaron a correr con ellos. No tenian ni idea de con quien estaban pero...
  
Si de verdad quisieran matarlos, ya lo habrian hecho.

Continuara... 
  





 

La Sigladura Capitulo Siete

                            Capitulo VII

                      Las Arenosas del sur. 

  
Carts piloto el pequeño esquife toda la noche. Su hermana y Luna durmieron algunas veces... Era evidente que estaban todos nerviosos, pero confiaban en poder hacerlo. Si seguian juntos lo lograrian.

Alcanzar Deventen, andando, en quince dias...

Su madre se lo habia ordenado, ya que intentar volver al Eizer hubiese sido un autentico suicidio. Y las demas opciones eran igual de arriesgadas.

A las diez de la mañana las dos niñas despertaron y tras parar en un recodo decidieron cual seria su siguiente movimiento.
-Muy bien, primero tenemos que buscar algo de comida y encontrar el modo de potabilizar algo de agua. Despues ya pensaremos que hacer con la planeadora.
-Carts, sabes de sobra que estas tres miseras truchas no van a durar mas de dos dias... estirandolas mucho, claro- comento su hermana.
-Pues buscamos algo por aqui, seguro que...
-¡ Dejalo ya, Willhem!- replico ella- De momento solo tenemos un par de revolveres y el rifle de Luna, que pretendes que cazemos con eso, un conej...

Su voz se extinguio de pronto, estaba mirando una pequeña canoa con una veintena de extraños seres encima que habia aparecido rio arriba. Ellos los estaban observando con un gesto extraño, una mezcla de admiración y de temor. Discretamente golpeo el hombro de su hermano, que desenfundo su revolver, Luna por su parte acciono el cerrojo de su rifle.

Pasaron cinco minutos sin que ninguna de aquellas criaturas hiciese el mas minimo ademan, al cabo de ese tiempo volvieron a meter los remos en el agua y empezaron a remontar el rio con total tranquilidad.
-¿ Los seguimos o no?- pregunto Carts.
-Siguelos, pero atento a sus movimientos. Luna ponte en la proa con el rifle, y lo mismo, atenta a lo que hacen.
-Vale...- murmuro apenas, tumbandose donde le habian indicado arma en riste.

Carts arranco el motor, que retumbo en la tranquilidad del extraño cañon en el que estaban. Aquellos de la canoa nisiquiera se molestaron en volverse a mirar atras. No parecian conocer lo que era un fueraborda, ni el sonido de un motor, aunque tampoco le temian.

Durante dos horas siguieron a la embarcación a una distancia prudencial, al poco advirtieron como el paisaje se tornaba mas arido y las paredes del cañon descendian hasta el nivel del rio. A pesar de que el rio estaba rodeado de vejetación, podian ver las dunas del desierto a lo lejos. Predat fue anotando su rumbo en una hoja de libreta, ayudandose de una pequeña brujula de bolsillo. Descubrio que estaban virando hacia el oeste. Poco a poco habia ido sacando el curso de ese ancestral rio, tan misterioso y temido.

Alcanzaron una prinitiva aldea, casas bajas de barro calles de distribucion irregular y sin pavimento alguno, raros ornamentos y tiendas de campaña de piel a las afueras. Fue alli en donde los remeros embarrancaron la canoa y se perdieron de vista, iban directos a la choza de su jefe, la mas grande. Muchas mas criaturas como esas  les observaban desde la rivera, boquiabiertos. Habia hombres, mujeres, niños, bebes y algun que otro decrepito anciano encorvado. Precisamente los ancianos eran los que miraban de reojo a los recien llegados.

Vestian con pantalones de piel atados a la cintura algunos cubrian el torso con mas pieles, aunque no todos. Las mujeres, por su parte vestian con blancas faldas de tela y cubrian el torso con un poncho de arpillera. Todos, o casi todos tenian joyas de huesos y conchas colgadas del cuello y los hombres portaban armas muy rusticas. Las habia hechas de hueso, de piedra y madera o con un oxidado y mellado trozo de metal.

Pararon justo enfrente de ellos y hubieron de transcurrir diez minutos hasta que esos seres les invitasen a bajar a tierra con extrañas palabras y sobretodo señas. Su lengua era curiosa, aunque indescifrable. Parecia mas el canto de un pajaro, era como si solo tubiesen tres vocales, ademas cuando hablaban acompañaban sus "palabras" de un sinfin de extraños gestos.

Embarrancaron el esquife en una lodosa rivera y pronto se vieron rodeados por una curiosa multitud. Eran seres extraños desde lejos, y desde cerca lo son aun mas. No debian dar importancia a la higiene, a juzgar por el hedor que impregnaba el aire y el hecho de que todos sus excrementos los apilasen en los tejados de sus chozas para secarlos, no mejoraba la situación.

Aparentaban ser como los Bipedos, caminando a veces a dos patas pero otras caminaban a cuatro. El termino que mejor los define es el de lagartos o reptiles. Tienen la pel escamosa y color marron clarito, los ojos son como los de un gato, tienen una cola enorme por detras y en vez de manos con cinco dedos poseen garras de cuatro dedos, tanto en pies como en manos. De vez en cuando sacan su lengua bifida afuera, al estilo de las serpientes.

Se acercaron a los chavales y sin ningun miramiento empezaron a manosearlos, palpando sus caras, sus cuerpos, sus cosas... algunos se acercaron, curiosos, a la embarcación y comenzaron a inspeccionarla de igual manera. No parecian haber visto a un Bipedo en su vida, de igual manera que ellos no habian visto semejantes seres jamas, sin embargo, Carts recordaba algo de Hombres lagarto, algo de un cuento que le contara su tio de pequeño.

De pronto detuvieron su inspección de forma brusca y se echaron al suelo de golpe. Uno de esos seres aparecio entonces andando a cuatro patas, directo a ellos. Aparte de que vestia diferente, como mas lujoso, tenia un cierto aire de autoridad y de anciano. Junto a el caminaban dos mujeres, ataviadas con mucha joyeria, y otro hombre, con mas pinta de siervo, con tres crios en su lomo.

Se acerco sin miedo a los extraños y poniendose erguido, comenzo a examinarlos mientras decia algunas palabras en su lengua, lo cual provoco sonoras carcajadas entre su gente. Finalmente hizo un ademan afirmativo al comprender que aquellos crios no representaban peligro alguno, de momento...

Pasaron alli un par de dias, y un par de gelidas noches a la intenperie, cerca del esquife, mendigando comida como podian. Apesar de que esta gente no apreciaba las balas como munición ni nada por el estilo, adoraban los botones, las cosas metalicas y las canicas de vidrio. Gracias a algunas cosas como esas que llevaban en los bolsillos pudieron obtener algo de carne, de pescado y de un extraño y delicioso musgo que cultibaban en una cueva cercana. Durante la noche quemaban los excrementos secos para tener luz y calentarse, atufando el ambiente hasta el punto de que Luna dormia con un pañuelo cubriendole boca y nariz.

Pero el plato gordo que les permitio abandonar por fin aquella extraña aldea fue, precisamente, su ya inutil esquife. Predat logro venderselo a un obeso lagarto con pintas de pescador, que lo queria porque no necesitaba de jovenes a los remos para impulsarse... O asi interpreto ella las señas que el otro le hacia.

Asi fue como reunieron las provisiones, ropas y otros enseres necesarios para la gran caminata que les esperaba. El primer paso consistia en cruzar las faldas oeste de la cordillera Arenosas del sur. Esta formación montañosa discurre paralela al gran Farallon, imposible de descender, y desde la cual se ve todo Mar Nuestro, casi hasta la costa confederada.
"Quiza veamos el puero de Hamilton y los acorazados confederados- bromeo jocosamente Carts, al poco de emprender la andaina.
-Meh...Nada del otro mundo entonces- respondio su hermana-¿ Que dices Luna, quieres mirar barquitos?
-No, no me hace la verdad...- respondio en un murmuro.
-¡ Bueno, vamos pues!- dijo Carts.

Asi pues inciaron la caminata alejandose de la aldea hacia el norte, la meta estaba aun lejos, pero confiaban en poder volverse a encontrar con su familia alli, en Devetem.

 Mientras se marchaban podian ver al feliz pescador ir de un lado a otro con el bote, ignorando que solo tenia mezcla para un par de horas mas. Como detalle, el fueraborda del esquife es un dos tiempos de veinte caballos, alimentado con combustible ligero o mas conocido como "Diesel Dosté". Predat queria ver la cara del ser en cuanto se le acabase el combustible, pero, lo mejor es irse de ahi, por si las moscas.

                                                 ...

-¡ Adelante!- dijo Pazert despues de que alguien petara en la puerta de su camarote.
-Señora, tengo que comentarle algo importante...- dijoFray entrando.
-Bueno, sienta pues- contesto cerrando el libro que minutos antes estaba leyendo y quitandose las gafas.
-Veras... Hable con Alfred y cree que puede ir a buscarlos al desierto. Aparte, yo estoy...
-¡ Ya vale Fray, leñe!- le corto Pazert- Ya hablamos de esto ayer, y te he dicho que no. No pienso dejaros cometer tal temeridad ni en broma, y tu no eres capaz de subirte a un avión... Lo sabes...
-¡ No pierdo nada intentandolo!- se puso en pie de forma brusca, apartando la silla-¡ Se que si quiero, puedo hacerlo!¿ Olvidas que yo era el mejor piloto de la C.A.F.?¿ Lo has olvidado?Tengo el record de buques destruidos en Congo Molóng- añadio con cierto tono de soberbia.
-Ya...¿ y por que llevas casi trece años sin volar entonces?- el semblante de Fray se torno turbio de improviso, su tez se puso palida como la nieve. En un movimiento lento y sin apartar la vista de Pazert, se sento- No olvide todo lo que hicistes, lo que fuistes. Se que eras el mejor piloto de ese pais.Pero, tambien recuerdo el accidente, ese desgraciado accidente que te metio el miedo... El miedo a volar...- tomo su mano con delicadeza, Fray estaba mirando a la nada, completamente ido. Estaba llorando, solo de recordar aquellos cinco tristes minutos que tardo su viejo Fariley I mk 3 en caer desde nuevemil pies de altura.
-Tienes razon....- musito al fin- es una locura,es una autentica locura... Pero no soportaria que algo le pasase, Luna lo es todo para mi.
-Deverias confiar mas en tu hija compañero- sonrrio un poco- 
¿ recuerdas quien fue la que vino a conseguirte trabajo a este barco?
-Si, como olvidarlo- empezo a esbozar una sonrrisa tambien. 
-Yo tambien estoy preocupada- abrio un cajon de la mesa y saco de el un papel, algo viejo- mi hija pinto esto para mi con nueve años, para darmelo en mi aniversario- lanzo una pequeña carcajada- No esta sola, Luna no esta sola. Va con una de las mejores derroteras de su promoción y con un... bueno, con un buen chorizo.
-Confio en ti, Pazert- dijo Fray levantandose, por primera vez desde que abandonaron los manglares y dejaron atras al Burningnail para reparaciones, se sentia vigorizado. Asi que decidio regresar a cubierta, a cumplir con su guardia como es debido.
-Mejor confia en ellos.- corrigio Pazert cuando el cerro la puerta.

Dibujo de Predat para su madre.

Volvio a la cubierta, se dirigio al aleron de barlovento y pregunto a Etreiger, que llevaba el timon, la velocidad en ese momento. nueve nudos marcaba la corredera, con el viento por el traves.
-¿ Podemos sacar unos pocos nudos mas no, señor Estreiger?
-Bueno, no veo inconveniente alguno Fray...
¿ Izo la escandalosa?-pregunto el.
-Vale, izela- respondio encogiendose de hombros.
-Arriva pues- camino hacia la cabria junto a la base del palo, gritando a los de cubierta-¡ Preparados para izar la escandalosa, vamos, vamos moveros! ¡ Monje, Hiro, al pico de cangreja!¡ Vamos rapido!
-¡ Si señor!- respondieron los dos al unisono, trepando raudos por los obenques.
-¡ Walter, atento en proa y cobrale escota a ese foque que esta flameando!¡ Atentos por favor, falto un minuto y la liais!
-Voy, Fray- dijo corriendo a la proa.

Fray alzo la mirada para ver al Monje y a Hiro desatar las fajas que mantienen la vela fija al pico de la cangreja. Esta vela, una vez izada completara a la vela Mayor y necesitara de pocas atenciones por parte de a tripulación. Es una vela triangular que se iza en el espacio comprendido entre el mastelero y el pico de cangreja.

En cuanto la gran panza de lona comenzo a flamear al viento, Fray la izo con la cabria en un par de vueltas de manivela. Luego cazo el puño de escota con el mismo aparato, pero, con un piñon diferente.  Pronto la vela estubo cazada y, como suelen decir, "trabajando".

En apenas tres minutos ondeaba al viento una nueva vela sobre el palo.Nada mas acabar miro a Estreiger fijamente y levanto el brazo por encima de su cabeza, algo inclinado.

El primer oficial aprecio el gesto de su compañero y consulto el clinometro. Con los dedos de la mano derecha dicto los siguientes numeros a su compañero, cero y nueve. Lo que viene a ser una escora de nueve grados a babor.

Fray movio las manos como si estuviese tirando de una driza imaginaria y se dirigio a proa. Ahora izarian un foque adicional, el petifoque.

El hecho de que se hablasen con señas no es casualidad, con el bramido del mar alrededor es imposible oir nada en claro, sobre todo cuando el barco pega algun que otro pantocazo.

Esta maniobra fue mas sencilla, Walter desato la vela, que reposaba plegada en la cubierta y, despues de enganchar y clarear las escotas, Fray la izo con otro piñon de la cabria. En cuanto el puño de driza toco arriba Walter la cazo con las mencionadas escotas y la puso a "trabajar" junto al otro foque.

El Monje ajusto la escota de la mayor, para aprovechar el viento al maximo, mientras Hiro clareaba algunas drizas en la cofa.
-¿ Cual es la velocidad señor?- tubo que gritar para hacerse oir.
-Dieciseis nudos Fray, y la inclinación es de doce grados a babor.    ¡ Buen trabajo!

Fray sonrrio pues si mantenian el ritmo, llegarian en cuatro dias a la ciudad. Por ello volvio a la cubierta y ajusto las velas de nuevo.

Continuara...